Greenpeace exige esta prohibición, para la que ya se ha establecido una fecha en Canadá, Australia, Irlanda, Cuba, Nicaragua y Venezuela.
El reemplazo de estas lámparas permitiría un ahorro de un total de energía similar al producido por la central Atucha I.
Estas lámparas transforman sólo el 15% de la energía que usan en luz, mientras el resto es convertido en energía calórica, lo cual aumenta el calentamiento global. Además, las lámparas de bajo consumo duran entre 5 y 10 veces mas y consumen un 75% menos de energía.
Si quieren mas información sobre las lámparas de bajo consumo entren a este link.
Y para mas información sobre la campaña de greenpeace pueden entrar aquí para descargar el informe.